jueves, 17 de febrero de 2011

¿COBARDES O VALIENTES? por: Ana María H. de Giannelli

Apenas comenzado este año seguramente nos preguntamos, y quizás con temor por los acontecimientos políticos y económicos, "¿qué nos depara este año?". ¿Nos enfrentaremos a él con angustia, perturbadas, anuladas como individuos, perdiendo el valor y el instinto de la defensa? (cobardía) ó ¿lo haremos con una superior virtud del ánimo, desestimando los peligros que puedan oponerse ? (valor que se lleva en el corazón y en la conciencia).

En el libro de Josué 1:2, el Señor mismo le ordena a su siervo "...ahora, pues, levántate y pasa este Jordán,...a la tierra que Yo les doy" y en el vs. 9: "mira que te mando que te esfuerces y seas valiente, no temas ni desmayes porque Jehová tu Dios estará contigo en donde quiera que vayas".

Podemos apropiarnos de esta promesa que Dios le hizo a Josué, porque el principio sigue vigente para nosotras, recordemos las palabras del Señor en la gran comisión "... y he aquí yo estoy con vosotros todos los días hasta el fin del mundo, amén" (Mt. 28:19)

Si leemos lo que sucedió cuarenta años antes en el libro de Números capítulos 13 y 14, tenemos al pueblo de Israel, "EL PUEBLO DE DIOS", a las puertas de la tierra prometida, pero quisieron más información antes de entrar a poseerla ¿acaso no confiaron en que Dios les tenía preparado lo mejor como se los había prometido?( Éx 33: 1-3). Allí envía Moisés a doce príncipes, doce líderes revestidos de autoridad, los doce en igualdad de condiciones, con la misma misión y con el mismo Dios.

La gran diferencia estuvo a la vuelta de los cuarenta días de haber recorrido la tierra:

• Del grupo espía, diez (mayoría) reconocieron que verdaderamente era tierra que fluye leche y miel, pero se sintieron como langostas ante los habitantes del lugar y dijeron:-"no podemos subir". Infundieron tal terror al pueblo que éste lloró toda la noche y deseó el volver a Egipto. Tenían grandes dificultades y un bajo concepto de Dios, arruinaron sus propias vidas y la de quienes le creyeron.

• Sólo dos (Josué y Caleb), además de admirar las bondades de la tierra, dijeron :- "Podemos, Dios está con nosotros". Confiaron en Jehová, miraron la dificultad a través de los ojos del Señor. Sólo para ellos, que confiaron en Dios, los gigantes que vieron allí, eran insignificantes. Nos dice la Palabra que había en Josué y Caleb OTRO ESPÍRITU

La cobardía dice " NO PUEDO", la valentía dice " PUEDO" en Cristo que me fortalece.

El camino que transitamos hacia nuestra Tierra Prometida tiene y tendrá muchas dificultades, está en nosotras sentirnos como langostas y peor aún, contagiarlo a otros, volando sin rumbo como una hoja en medio de la tormenta, ó sentirnos seguras de la victoria junto al Señor, demostrando que verdaderamente en nosotras hay OTRO ESPÍRITU, porque pertenecemos a la nación santa, al pueblo adquirido por Dios, por eso:

 A grandes problemas, el poder de Dios es aún más grande.
 Pidamos a Dios que nos muestre su voluntad en cada decisión importante.
 No hagamos nada por las propias fuerzas, sino con el Señor

Así como Dios le encomendó a Josué:-"esfuérzate", nosotras también debemos hacerlo, basándonos en: 1 - La promesa de Dios ( vs. 5 y 6), una victoria segura.
2 - La Palabra de Dios ( vs. 7 y 8), la guía segura.
3 - La presencia de Dios (vs. 9) un poder sustentador.

La vida victoriosa es simplemente una vida rendida totalmente a Dios, en la que Cristo vive dentro y en completo control, una vida en la que el único deseo es dar gloria a Jesucristo.

Por eso hermana: levántate, ponte toda la armadura de Dios (Ef. 6:13-18) y recorre este año confiando en que el Señor tu Dios estará contigo, "porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio" ( 2ª Tim. 1: 7).